Cereal integral, una opción deliciosa y nutritiva como parte de una alimentación saludable

Los cereales integrales, también conocidos como cereales de grano entero, contienen importantes nutrientes que favorecen a la salud y el buen funcionamiento de nuestro cuerpo, aportando energía y saciedad.

Una característica importante de los cereales integrales es que mantienen todas las capas del grano incluyendo su cáscara externa. Al no estar refinados, brindan hasta cuatro veces más fibra, vitaminas y minerales que su versión refinada.  

“Los productos elaborados con grano entero son más ricos en fibra y aportan menos calorías. Estos ingredientes ayudan a disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares y ofrecen mayor sensación de saciedad, lo que contribuye a controlar la cantidad de alimentos que ingerimos”, señala Patricia Vial, Gerente de Nutrición, Salud y Bienestar de Nestlé Centroamérica.

Foto ilustrativa.

El consumo diario de al menos 48 gramos de granos integrales constituye un hábito saludable, no solo para mantener un peso adecuado y una buena digestión; sino, además, contribuyendo a proteger el corazón y el sistema gastrointestinal.

Asimismo, los cereales integrales son fuente de carbohidratos y proteínas.

“El cereal integral es un alimento que se puede incluir fácilmente es nuestra alimentación diaria. Al no ser refinado, conserva sus 3 partes: el salvado, germen y endospermo, estos últimos son los encargados de proporcionar un alto contenido de fibra y de vitaminas B1 y B2”, agrega Vial.

Un estudio del European Journal of Nutrition, indica que el consumo de granos enteros para Costa Rica es de 14.9g/día, una media inferior al promedio recomendado. Para alcanzar la cantidad recomendada por diversos organismos internacionales de salud, compartimos algunos consejos para incluirlos en tus comidas.  

Complemente sus desayunos con cereales integrales

El cereal integral es una deliciosa forma de sacarle provecho al desayuno e iniciar con energía nuestras mañanas.

Si bien es cierto que su consumo no se limita solo al desayuno, iniciar el día con una porción adecuada de cereal integral, acompañado de otros grupos de alimentos como lácteos, proteína y fruta, es una alternativa nutritiva, rápida y divertida tanto para niños como adultos.